Cada Lunes

Cada mañana de lunes todos se reúnen en las vías bulliciosas de la Lima gris. El caos y la pereza va dominando a cada ser que lucha por sobrevivir. Entre bocinas, gritos y la hilarante actitud de los que buscan el pan cada día, nos vamos convirtiendo en títeres del destino Cada mañana de lunes el tiempo no es efímero cuando nos sentamos en los paraderos a espera de un porvenir. Y así cada mañana de lunes cada uno busca lo suyo, mientras el sol da su luz a los que mendigan de día. Y en las noches las oscuras esquinas delatan a una cuidad de infortunio donde todos son ciegos jugando a vivir en una Lima desconocida.